jueves, 10 de mayo de 2012

Quiero comprar tu MARCA, ¿Cuánto Vale?

Nuestros sentidos perciben las marcas como nombres, términos, diseños, símbolos o cualquier otra característica que nos facilita distinguir un producto, un servicio, una organización o hasta un personaje público. Sin embargo, más allá de lo que podemos percibir, las marcas representan muchas otras cosas, como pensamientos, sentimientos, percepciones, imágenes, experiencias, creencias, actitudes que se vinculan a una identidad y que finalmente se traduce en una experiencia para quienes interactúan con la marca y su identidad.

La identidad y experiencia de marca ha llegado a ser tan importante que, incluso en determinadas organizaciones, la marca puede llegar a tener un valor económico mucho mayor que los activos fijos, tales como la maquinaria, los edificios, los muebles, los terrenos, etc. No podemos olvidar los ejemplos de marcas como Coca-Cola, McDonald's, Microsoft, Apple, Mastercard, Disney, Mercedes-Benz, que en las últimas décadas han representado una contribución mayor al valor que los accionista perciben de las compañías que las poseen.

Ahora bien, también es importante tener en cuenta que éstas marcas han llegado más allá de la simple percepción de los sentidos de su público, y trascienden al punto de crear efectos emocionales y sentimentales en las personas. Y son éstos efectos los que van incrementando el valor de las marcas y su impacto económico en la contabilidad y las finanzas de las organizaciones. También hay que aclarar que para llegar a éste punto, la marca debe conservar una coherencia entre lo que promete y comunica, con lo que realmente cumple, que finalmente resulta en la experiencia de quienes siguen a la marca. Ésta coherencia es la que permite que la marca pueda influenciar las preferencias de los consumidores, empleados, inversionistas y hasta autoridades de gobierno. En un mundo lleno de muchas opciones, esa influencia puede representar un éxito comercial y valor para los propietarios y accionistas. Hasta las organizaciones no gubernamentales se están dando cuenta que la marca es el mejor activo para atraer donaciones, voluntarios y patrocinio.

Entonces no es locura afirmar que hay que invertir en la marca, para que mantenga una comunicación continua con su público, pero también para mantener esa coherencia de la que hablamos, entre lo que dice la marca y lo que hace en todo sus interacciones con el entorno. Ésta inversión genera un efecto que puede ser incluso mucho mejor a las inversiones que se hacen sobre otros activos de la organización que se valorizan. Por ello hoy es posible afirmar que la mayor parte del valor económico de una empresa se deriva de intangibles. La marca es un intangible especial, que en algunas compañías llega a ser el activo con el que se puede obtener el mejor resultado o impacto económico.

Finalmente no podemos descartar en un mundo de negocios globalizados, que un día toquen la puerta de nuestra empresa y nos digan: Quiero comprar tu marca, ¿Cuánto Vale? 

0 comentarios:

Publicar un comentario

 
Design by SOSmarca